martes, 10 de julio de 2012

I Still Haven't Found What I'm Looking For (I)


Creo que hay varias maneras de crecer. Algunas son obvias y evidentes, otras son más sutiles, menos obvias, pero no por ello menos importantes. Hay momentos en tu vida que realmente te marcan y mientras los vivis, una vocecita en tu cabeza te dice "este momento, este momento es importante, mantenete alerta, presta atención a todo, no te pierdas nada por que esto es importante, algo va a pasar que no podes perderte. ¡Abrí los ojos!".
Habiamos salido con quienes hoy en día son mis ex-cuñados. Esteban, quien en ese momento estaba en pareja con Amanda y Laurita, que era novia de Ariel. Dimos unas vueltas en la combi, tomamos un par de birras y despues de cansarnos de charlar boludeces y ver las mismas caras, nos fuimos derecho al Munich.
El Munich estaba medio vacio, creo que era una noche de miercoles, o posiblemente un jueves (en Tres Arroyos se sale miercoles, viernes y sabados, no me pregunten por que logica extraña).  La noche no pintaba demasiado buena, y yo la verdad sin demasiadas ganas de nada no hice mas que irme a la barra del fondo y tomar una cerveza tras otra con mi cuñado mientras el lugar se iba llenando de a poco. Laurita si mal no recuerdo se encontro con alguna de sus amigas y se fue a charlar con ella.
Debian ser las 4:30 a.m cuando decidi ir al baño por enesima vez en la noche, poca idea tenia en ese momento que esa ida al año iba a cambiar mi vida tan drasticamente, pero me estoy adelantando a la historia.
Hacia ya un tiempo de mi ultimo intento de irme a vivir a otra ciudad, atras habia quedado Mar del Plata con la Señorita X. Me habia vuelto de La Plata hacia poco tiempo, y mi cabeza era más un mar de dudas sobre el futuro y sobre mi mismo. En el medio de todo eso, el amor parecia no tener lugar o no tener importancia. No estaba solo, es muy raro en mi vida que tenga momentos de soledad, pero tampoco estaba realmente acompañado, y mas que el polvo ocasional, no habia absolutamente ninguna mujer en mi vida que realmente me importase más que el par de horas de diversion que podiamos llegar a compartir. Eso sinceramente no me molestaba, creo que en el fondo yo todavia seguia perdidamente enamorado de la Señorita X (creo que en estos ultimos 10 años esa fue la unica constante de mi vida). Esto hacia que mi interes por las mujeres no sea mas que superficial, mi corazon estaba tomado y sin importar cuan fuerte tratasen o cuanto lo deseemos los dos, no habia lugar para dos personas ahi adentro. Claro, esto fue así hasta que...
Salí del baño y me fui caminando derecho para la barra donde estabamos, el espacio que separaba la puerta del baño de la barra serian unos 4 metros, y para llegar de uno al otro, habia que atravesar todo lo que servia de improvisada pista de baile en el pub. Cuando ya habia recorrido practicamente toda la distancia y me disponia a volver a mi lugar en la barra a terminar la noche como la habia empezado, una vocecita habló adentro de mi cabeza.
"No Camilo, no y no. No te vuelvas a la barra. ¡Pegá media vuelta que te acabas de perder algo que si lo dejas pasar, te vas a arrepentir toda tu vida!"
Y eso hice, pegue media vuelta, me fui al otro lado de la pista y empece a mirar. El gordo Masioli pasaba la misma musica de mierda y hablaba boludeces, yo miraba alrededor mio, y de repente, una chica se corrio, y ahi, por el medio de la pista, donde habia pasado hace 10 segundos la vi.
Me acerque, la mire a los ojos y le dije "Yo sé que te lo deben haber dicho muchas veces, pero sos la mujer mas hermosa que vi en mi vida!".

No hay comentarios:

Publicar un comentario